Ella

Ella se sienta tranquila en su sofá,pegadito a una gram ventana.De vez en cuando suspira recordando,anhelando.
Al medio dia se enfunda un delantal y prepara la comida.Sus movimientos lentos y cautos le recuerdan su edad.
Come y vuelve a su sofá.Y mira por la ventana con la esperanza de ver pasar a alguien conocido,algún vecino o tal vez alguno de sus hijos que pasarán rápido y con la cabeza agachada para evitar saludarla.
Sufre,se siente sola y sufre.El dolor la esta matando y ella lo sabe.Sufre y se peina y su cabellera blanca,perfuma su cuerpo y se tumba una noche mas.
Amanece y da gracias a Dios por darle un nuevo dia.Se pone sus zapatillas negras,calentitas y cómodas.
Hoy su hija,la mas pequeña,vendrà a verla y se siente eufórica,con unas ganas enormes de ver a su hija,de estar con  sus nietos y por un ratito,dejará de estar sola.
Se emociona cuando el timbre suena.
Abre la puerta y todo es cariño,abrazos,besos,amor.
Su hija la adora,la mima,la quiere con locura y ella lo sabe.Se abrazan y hablan un buen rato.Mientras su nieta la peina,le gusta el olor de su piel y le acaricia la cara con una ternura inmensa.
Pero llega la noche y las despedidas.
Hoy es feliz,se siente en paz.La visita de su hija pequeña,tanto amor.Su nietecita y sus juegos y ese yerno paciente que tanto la quiere.
No puedo pedir mas-piensa ella.
Y cierra los ojos una noche mas,se le cae alguna lagrimita pensando en el pasado,pero se siente en paz.
Cierra sus ojos y se va para siempre.
Queda un sofá vacio delante de la gran ventana.
Su delantal cuelga allí en la cocina y en su cama ella,con su blanca cabellera y ese dulce olor a azahar.
Sueños rotos,corazones destrozados que no supieron decirle adiós.
Su hija pequeña se rompe en mil pedazos,le llora y le llorará siempre.Por ese amor tan inmenso que las dos se dieron.